Diez consejos esenciales para cocinar la pasta
A menudo hemos recurrido a compartir recetas de pasta con vosotros, pero hoy se me ha ocurrido que lo que puedo ofreceros son los trucos que yo uso para cocinar la pasta en casa. Admito que no siempre los pongo todos en práctica porque la cocina, como sabéis, es muy creativa y hay que ir probado. Esto os vendrá bien para cambiar algún mal hábito que tengáis cocinando pasta.
Consejos para preparar pasta
No todas las pastas son iguales. Suena evidente, pero a veces nos dejamos llevar mucho por el dinero y no nos paramos a pensar en la calidad. La pasta no suele ser un elemento de recortes, ya que cunde mucho. Llévate aquellas marcas que tengan una buena reputación en el mercado o las marcas blancas que provengan de una empresa seria.
Usa una olla que sea lo suficientemente grande como para dar cabida a toda la pasta sin que se hacine. Por un kilo de pasta, añade ocho litros de agua. Con estas cantidades te aseguras de que la pasta se puede mover libremente mientras se cocina.
Añade sal al agua. Una cucharada pequeña por litro va bien. Esto le da un toque de sabor que ayuda a crear un plato bien sazonado.
Lleva el agua a hervir antes de añadir la pasta. Una de las causas principales de que la pasta se pegue es que el agua no ha llegado aun a su punto de ebullición. Cuando se mete la pasta en agua que no está hirviendo, se liberan antes los almidones naturales que actúan como pegamento.
Mantén el calor y consigue de nuevo que el agua hierva. En el caso de los spaghetti o similares, mezcla la pasta hasta que se sumerja en el agua de cocción y tapa la olla hasta que vuelva a hervir. Luego sigue cocinando con la olla abierta. Este punto es importante.
Remueve la pasta de dos a tres veces mientras se cuece. Se cocina pronto, entre ocho y diez minutos aproximadamente.
No agregues aceite de oliva al agua de cocción. Sé que es un truco que se emplea mucho, pero las capas de aceite de olvia de la pasta evita que la salsa se adhiera bien a la pasta cuando se hace la mezcla.
Cocer la pasta «al dente». Aunque a los españoles no nos llama especialmente la atención, deberíamos luchar por evitar que nuestra pasta se cocine demasiado. Ya comenté una vez que los macarrones engordan menos cuando están al dente y es aplicable para el resto de las pastas. Esto lo puedes conseguir dándole menos tiempo de cocción (si en el paquete pone 7 minutos, entonces darle 6) o por degustación.
No enjuagues la pasta. Esto es un error muy frecuente. Cuando se lava la pasta, le quitamos la mayor parte de almidones y nutrientes que estamos buscando para disfrutar al primer mordisco.
Guarda un poco del agua de coccción. Además de que es buena para las plantas, prueba a añadir un chorrito de ese agua usada para la salsa que vaya a acompañar a la pasta. Créeme cuando te digo que esto le da un sabor diferente.
Me encantaría que compartierais conmigo vuestros trucos para cocinar la pasta o me comentarais qué os parecen los que yo recomiendo.