Propiedades de los albaricoques
El verano está a punto de visitarnos, y qué mejor manera de recibirlo que degustando frutas tan sabrosas como el albaricoque.
Del albaricoquero se obtiene el albaricoque, una fruta que ya se cultivaba en China en el año 3.000 a.C. Su pulpa es exquisita, jugosa y, sobre todo, muy dulce. Se degustan normalmente a modo de piezas de fruta fresca, aunque también puede utilizarse para rellenar tartas e, incluso, preparar una carne fría si lo encurtimos con vinagre y clavos. Otra opción es escalfarlos con azúcar y macerarlos a partes iguales en almíbar y brandy. Existe una técnica que permite que los albaricoques se transformen en los populares orejones. En este caso, la fruta se somete a una técnica de secado al sol que permite aprovechar más y mejor las propiedades nutricionales que contiene.
Muchas provitamina A y fibra: Es una fruta que mejora el tránsito intestinal y que incorpora taninos, una sustancia especialmente beneficiosa para aquellas personas que tienen digestiones pesadas o estómagos delicados. Por otro lado, su contenido en provitamina A (o beta-caroteno) tiene una acción antioxidante y es buena para los huesos, el cabello, las mucosas, la piel y el sistema inmunológico.