Tortillas francesas más blanditas

Tortillas francesas más blanditas

Las tortillas francesas, o tortilla liada, es simplemente batir un huevo y echarlo en una sartén con un poco de aceite para que se nos haga. No tiene mucho misterio pero algo de lo que puedes quejarte al hacer una tortilla francesa es que ésta queda muy poca cosa, como si no tuviera casi consistencia (y en realidad, al tener solo un huevo, mucha consistencia no tiene, todo hay que decirlo.

Sin embargo, sí que se le puede dar más esponjosidad de una manera muy sencilla: separando yema y clara. Si las yemás las bates por separado de las claras (éstas montadas a punto de nieve) y después unes ambos elementos la tortilla que te salga de ahí va a ser muy diferente de otras tortillas que hagas sin esto.

Es cierto que puede llevarte más tiempo, pero el resultado es mucho mejor y como sabes, la comida también entra por los ojos, de ahí que sea importante también esto.

Hay algunos que le echan a la yema un poco de colorante de paella para que tenga más sabor y también, por qué no decirlo, para que coja un color más amarillo-naranja, uno de los colores que va a coger con ese colorante. Esto es más bien al gusto de uno porque no a todos les gusta.

Como recomendación, la sartén que esté a fuego medio cuando eches el huevo y procura no moverla mucho, solo cuando sea necesario darle la vuelta para que así no se vaya a romper ni rompas el volumen que puede adquirir en la sartén (ya sabes que, a la ahora de ponerla en el plato, la tortilla mengua su tamaño). De esta forma tratas de conservar la forma el mayor tiempo posible, al menos hasta llegar a la mesa.

Compartir este artículo

Deja un comentario

¡Ediciones Letra Grande hace literatura para todos!
Disponible para Amazon Prime